
en construcción


Não choro mais. Na verdade, nem sequer entendo por que digo mais, se não estou certo se alguma vez chorei.

Acho que sim, um dia. Quando haviador. Agora só esta uma coisa seca. Dentro, fora.Por vezes fecho os olhos e tenho a impressão que esses telhados intermináveis são a única coisa que existe dentro de mim, você me entende agora? O quê?


Não choro mais. Na verdade, nem sequer entendo por que digo mais, se não estou certo se alguma vez chorei.
cartografía sobre morangos mofados
Não choro mais. Na verdade, nem sequer entendo por que digo mais, se não estou certo se alguma vez chorei. Acho que sim, um dia. Quando haviador. Agora só esta uma coisa seca. Dentro, fora.Por vezes fecho os olhos e tenho a impressão que esses telhados intermináveis são a única coisa que existe dentro de mim, você me entende agora? O quê? Sim, tenho vontade de me jogar pela janela, mas nunca foi possível abri-la. Não, não sei o que gostaria que você me dissesse. Dorme, quem sabe, ou está tudo bem, ou mesmo esquece, esquece. Não consigo. Quando vomito sobre o pão, não consigo comer nem vomitar depois. Gosto de vomitar, é um pouco como se conseguisse chorar. Quem sabe você conseguiria pelo menos me ensinar um jeito de vomitar sem precisar comer?
C. F. Abreu
Performance duracional
Duración 4 horas Lugar Predio en demolición ubicado en Cidade Baixa, Porto Alegre. Brasil. Idea original y registro Alfonso Sánchez-Martínez Performers Carolina Liczbinski y Alfonso Sánchez-Martínez Pintura Morangos mofados, de la serie "Mapa Onírico de Porto Alegre". Técnica Tinta acrílica sobre tela enmohecida. Vestuario recolectado en el mismo sitio de la performance, exeptuando la microescultura con forma de estilete "Visión de suda-merica" confeccionada en plata y green gold y que es el conector con la investigación en artes integradas "De orfebres y meretrices".




Deconstrucción para un desnudo
Fotografías para un oleo sobre madera 60x90cm




Body art o el ser o no ser de una performance
La pena es una enfermedad que adquirí al nacer. Siempre tuve pena, una pena intrínseca, esa que corroe como ácido derramado en carne fresca. Esa es la pena que veo en las fotografías de mi infancia, en las de mi adolescencia y es también esa la imagen que hay en mi espejo cada uno de los crepúsculos. Pensé que con el tiempo la pena se iría, pero cada día que pasa se torna más y más profunda. Más inabarcable. Me he convertido en un ser que exuda pena, que transpira pena. El dolor es un estado constante en mí. El dolor de las pérdidas y de las carencias, el dolor por lo incomprensible que es el hombre, el dolor por las miradas estúpidas y por las inocentes miradas de los niños que no saben lo que vendrá. He llegado a convencerme que mi dolor no es más que una forma de cáncer. Cómo llamarlo: cáncer del alma, cáncer de espíritu, cáncer del pensamiento, cáncer de sentir cáncer, cáncer de lo absoluto, cáncer ontológico. Mi pena tiene ese carácter. Pienso que mi pena la tuvieron otros que, lógicamente, no están para acompañarme. Este cáncer ha ido royendo cada uno de mis actos, cada una de mis intenciones y de mis actividades. Mata el amor de quien me ama, mata el amor si que es verdad que existe algo así. Mata la admiración que podría generar amor. Recuerdo que Artaud responsabilizó a la sociedad por la muerte de Van Gogh. Yo la responsabilizo por esta enfermedad que me está matando. La culpo en general y también a modo particular: culpo a la mujer que me trajo a dar pasos y no vio en mis ojos que no estaba para este mundo, culpo a la mujer que me dio una hija y luego me la quitó despiadadamente, culpo a todos lo que me vejaron cuando era un niño melancólico, culpo a lo que no me dieron más que castigos, culpo a los hogares de menores, culpo a los colegios y a la mayoría de sus profesores, culpo a los políticos disfrazados de artistas, al ready made y al body art y a toda esa mierda que llena los museos y las calles, a los demagogos vestidos con piel de poeta, a los manipuladores travestidos de filántropos. Culpo a los que quieren, a como de lugar, retirarme mi estatus de artista, a los que dijeron que me amaban, a las noches que no me dieron la oscuridad necesaria para perderme, no encontrar el camino hacia el día. A la mujer que me dio su miel y luego la trocó en veneno. Culpo a estas manos que no han hecho nada y a este cuerpo que se resiste a la metástasis. Culpo a dios por su perfomance instalada en cada uno de nuestros pueblos. Lo culpo, sobre todo, por no existir y dejarnos sólo su culpa. (de Ciudades y parias)
Performance
Duración 50 minutos Lugar San Telmo, B. Aires. Argentina Idea original y registro Alfonso Sánchez-Martínez Performer Alfonso Sánchez-Martínez Implementos recolectado en el mismo sitio de la performance: craneo humano, volante de obra de teatro y autoadhesivo de autoría de https://www.facebook.com/pepiterfuchsiter. Libros Performance, Diana Taylor, Asunto impreso ediciones 2012. Autobiografía, Darwin, Alianza Cien. 1995 .Iluminación directa y sombra realizada con foco LED.




Nacimiento de un cuerpo-imbunche ontológico
Comparas tu actual obra con ésta, la nuestra, la tuya, la mía, la de Blanca, la de Chile, la de suda-mérica la que nos duele. Ésta que me hace tener en carne propia el prodigio, el monstruo, el mito-hombre, el arquetipo quitándome la normalidad. Me dices que hacerse un cuerpo sin órganos implica dejar de ser un organismo, pervertir las significaciones y dejar de experimentarse como un yo, es un modo de individuación a partir de las multiplicidades... lo dices como si fuera nuevo, como si no lo supiese, como si los poetas no adelantaran los acontecimientos, como si la poesía no fuese el lastre que te lleva al abismos, como si Pessoa no nombrase las sinfonía antes que Deleuze. Y sigues como un cacatúa, diciendo de memoria que hacerse un cuerpo sin órganos, es una experimentación ético política… hacerse un modo de individuación diferente; a partir de una experimentación sobre el propio organismo que viole la relación establecida con el cuerpo; a partir de la perversión de los significados y los campos semánticos; a partir de dejar de experimentarse como un yo y comenzar a reconocerse como una multiplicidad de intensidades, sensaciones y deseos.
Amo esa pasión tuya que te construye mientras me adoleces, esa pasión que me acerca a tu cuerpo cuando estás cerca y me aleja cuando no puedo tocarte en este registro. Te sueño, es lo que me queda, soñarte y esperar despertar a tu lado y no pasa y no pasará tal vez. Ya no sé que es el cuerpo y que no lo es, a eso te refieres con lo del cuerpo sin órganos, a este desconocimiento nuestro, a este estar ausentes y seguir el curso de cada cual. Tú con el cuerpo que amaneces y yo en mi lúgubre pieza llena de moho, de esta estética de la humedad que me va convirtiendo de un adefesio, que no se atreve siquiera a mirarse al espejo, por miedo a reconocerse bestia de sí mismo. No estás estos días, no estás cuando ellos nos emboscaron en el Agüita de la Perdiz para golpearnos la mañana del 1° de enero. Me sales con que la expresión deleuziana soy un cuerpo; o me constituyo a mi mismo como un cuerpo, quiere decir, me construyo en mi relación corporal, que no es solo biológica, sino ética y estética [...] ¿por que esta cohorte lúgubre de cuerpos cosidos, vidriosos, catatonizados, aspirados, cuando el CsO también está lleno de alegría, de éxtasis, de danza.
Querida me gusta que reflexiones, pero decir por decir... usted es la interprete, es suyo el desafío. Viva su alegría y extasis, que no son los míos y no sé si son transmisibles. Busque: Guattari, Deleuze, Foucault. Yo me sigo quedando con los "risomas" espontáneos, dolorosos, "brillantemente oscuros" y vivificantes de Vallejo, Pessoa, Pizarnik o Juan Luis Martínez y un poquito de Ciorán para ponerle un toque de gravedad europea decimonónica. Con la poesía me basta para vivir o morir, para que me sobre y me baste el cuerpo y su danzar animal. Me basta, lo demás es para cuando estoy insomne. (de Ciudades y parias)
Performance
Duración 40 minutos Lugar Molulco, cerca del Lago Natri, selva de árboles nativos en la Isla Grande del Archipiélago de Chiloé Performer Alfonso Sánchez-Martínez Implementos Lianas, fibra vegetal y alambre recolectado en el mismo sitio de la performance y en la localidad de Chonchi.


Mensagem rizomático para Re-nascer
O GÊNERO DE LIBERDADE MAIS IMPORTANTE, É SERES VERDADEIRO / TROCAS A TUA REALIDADE POR UM PERSONAGEM / TROCAS OS TEUS SENTIDOS POR UMA ATUAÇÃO/ DESISTES DA CAPACIDADE E EM TROCA POES UMA MÁSCARA/ NÃO PODE HAVER UMA REVOLUÇÃO EM GRANDE-ESCALA, SE ANTES NÃO HOUVER REVOLUÇÃO INDIVIDUAL DA PESSOA/ PRIMEIRO TEM QUE ACONTECER CÁ DENTRO. J. Morrison
Intervención pictórica
Lugar Pinacoteca Bar. Rua Republica. Cidade Baixa. Porto Alegre. RS. Brasil Implementos Tinta acrílica sobre muro y puerta de refrigerador que refleja y proyecta la intervención pictórica dando vida a este ser. Dimensiones 280x300 cm.

orfebretriz
O R F E B R E /ME R E T R I Z
Las historias se entrelazan, inevitablemente, hay una sincronía en este cabaret. La sensualidad y la vanidad son savia para nuestras ansias. Calcinatio, solutio, elementorum separatio, coniunctio, putrefactio, coagulatio, cibatio, sublimatio, fermentatio, exaltatio, augmentatio, proiectio. Luego de tantas búsquedas los encuentros son nimios, a ratos encuentro sitios de excavaciones arqueológicas, huesos que son tizas con los que escribo tu nombre. Las capitales se hacen solo de materiales cotidianos y dejan a la vista lo que claudicas. Los reveses de la semántica me provocan vértigo. Mis manos han hecho un pacto con los materiales y con los cuerpos. En los materiales el ácido busca certezas, la plata se muestra lechosa en lo sulfúrico. Los cuerpos ante la luna son sublimados y se mueven. Hice un pacto con un cuerpo al que me he hecho asiduo. Te busco y gusto en cada cuerpo y pago con las piezas que arrancan de mis manos. Estoy en eso de evaporar humores de trasnoches y unificarlos con los hijos de mis manos, con la fermentatio del sexo. Bienvenidas sean las colaboraciones para armar un cabaret, una sagrada instalación…
(de Orfebres y meretrices)
Performance + Laboratorio multimedial
Duración 12 horas Artes integradas poesía, danza, teatro, artes visuales y arte sonoro Fotografía Andrea Giménez, Cristina Herrera, Carla León Pino y Alfonso Sánchez-Martínez Poemas, Esculturas, pinturas, dibujos e instalaciones Alfonso, Sánchez-Martínez
Performance
Duración 6 minutos Artes integradas poesía, danza, teatro, artes visuales y arte sonoro Imagen proyectada Daniela Mülle Sincronización Sonora Andrés Rant y Fernándo Matus de la Parra Sincronización Corporal Blanca Rizzo Interprete Denise Fantini Poema y sincronización general Alfonso, Sánchez-Martínez